Comprensión de la Tecnología de Captura y Almacenamiento de Carbono La Captura y Almacenamiento de Carbono (CAC) es una tecnología probada que captura las emisiones de dióxido de carbono (CO₂) de fuentes industriales y plantas de energía, para luego transportarlas y almacenarlas permanentemente bajo tierra. Este proceso evita que el CO₂ entre en la atmósfera, donde contribuiría al cambio climático. Cómo Funciona la Captura de Carbono La tecnología de captura de carbono separa el CO₂ de otros gases producidos durante procesos industriales o la generación de energía. El método más común, la captura postcombustión, elimina el CO₂ de los gases de combustión después de la quema de combustible. Este proceso suele usar disolventes químicos, como las aminas, que absorben selectivamente el CO₂ de la corriente de gases. La captura precombustión elimina el CO₂ antes de la combustión del combustible, convirtiendo el combustible en hidrógeno y CO₂. La combustión con oxicombustible quema el combustible en oxígeno puro, produciendo un gas de combustión compuesto principalmente por CO₂ y vapor de agua, lo que facilita la separación. Métodos de Transporte Una vez capturado, el CO₂ debe transportarse a los sitios de almacenamiento. El método más común utiliza gasoductos a alta presión, similares a los usados para gas natural. El CO₂ se comprime hasta un estado denso, parecido a un líquido, para un transporte eficiente. Para ubicaciones de almacenamiento en alta mar, barcos especializados pueden transportar CO₂ comprimido, aunque los gasoductos siguen siendo la opción más rentable para grandes volúmenes. Almacenamiento en Formaciones Geológicas El almacenamiento permanente de CO₂ ocurre en formaciones geológicas profundas, generalmente a 1,000 metros o más bajo la superficie. Las formaciones más adecuadas incluyen yacimientos agotados de petróleo y gas, acuíferos salinos profundos y vetas de carbón no explotables. Los acuíferos salinos son formaciones rocosas saturadas con agua salada, que ofrecen la mayor capacidad de almacenamiento potencial. Estas formaciones han contenido fluidos durante millones de años, lo que demuestra su capacidad para retener CO₂ permanentemente. Múltiples barreras, incluidas capas de roca sellante (caprock), evitan la migración hacia arriba. Por Qué la CAC es Importante para la Industria Muchos procesos industriales, como la producción de cemento, la fabricación de acero y la petroquímica, producen CO₂ como subproducto inevitable de las reacciones químicas. Para estas industrias, la CAC puede ser la única opción viable para lograr una reducción significativa de emisiones mientras mantienen la producción. La generación de energía a partir de combustibles fósiles también puede beneficiarse de la CAC, especialmente en regiones que dependen en gran medida del carbón o el gas natural para producir electricidad. La CAC puede reducir las emisiones de plantas de energía en un 85–95%. Beneficios Ambientales La tecnología CAC puede evitar que miles de millones de toneladas de CO₂ entren en la atmósfera. El Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC) identifica la CAC como esencial para alcanzar los objetivos climáticos globales, particularmente para reducir emisiones de la industria pesada. Desarrollo Global Actual Decenas de proyectos de CAC operan en todo el mundo, y muchos más están en desarrollo. El proyecto Sleipner en Noruega ha almacenado con éxito más de 20 millones de toneladas de CO₂ desde 1996, demostrando la viabilidad a largo plazo de la tecnología. Comprender la tecnología CAC es crucial para evaluar las estrategias regionales de gestión de carbono y las opciones de descarbonización industrial.